Nirvāņa es una palabra del sánscrito que nos refiere a extinción, calma, quietud, enfriamiento, cese, soplo, desaparecer.
….Ya es Septiembre, y aunque aún hace calor, ya llegó el momento….Esta mañana, a eso de las 9, casi era imposible aparcar. Había multitud de papás y mamás, (bueno en realidad más mamás que papás). Junto a los mamás, de la mano, los niños, con sus uniformes, sus carteras, y algunos, los menos, con su sonrisa en la cara. Era el primer día de cole, después de dos meses de estupendísimas vacaciones.
Algunos, los menos, tenían ganas de volver, pues se han aburrido un poco durante el verano, otros, los más, venían además de muy morenitos, con pocas ganas de hacer nada.
Los mayores han entrado sin rechistar mucho, se les ha pasado un poco el mal rollo, cuando han visto a sus amiguitos del “invierno”, en las mismas circunstancias que ellos, y aunque…” mal de muchos…consuelo de tontos…”parece que eso relaja.
Sin embargo, los más chiquitines, los que apenas calzan un 28, lo han tenido un poco más…digamos que diferente. Éstos, tienen unas aulas monísimas, con los pupitres de colorines, sillas enanas, peluches, y multitud de juguetes, que en menos de un mes estarán destrozados. Tienen las “seños” más guapas y más jóvenes, de todo el cole y sin embargo…nada de eso les ha evitado el disgusto, ni los vómitos, ni las pataletas, ni las caras de terror cuando sus papás (más bien sus mamás), los han dejado “abandonados” en el cole de los mayores…
- Dentro de un ratito vengo a por ti, pórtate bien-
(con los ojos muy abiertos)
-¿Pero cómo qué te vas?¡¡, ¿me piensas dejar aquí sól@...?
A partir de ahí, el terror se apodera de ell@s, lloros, lágrimas, más lloros, algunos incluso han vomitado del berrinche, pero nada, nada de eso les ha valido para que sus papás se los llevasen con ellos.
-mamá tiene que trabajar cariño…no te puedes venir conmigo….te tienes que quedar aquí….-
….más lloros, más pataletas, más cara de pavor… y al final rendidos ante la evidencia, deciden desistir, y callar y cantar con el resto de niños. A partir de ahora, cantarán todos los días, y aprenderán que la vida es así, y que algún día, ellos al igual que sus papás también alcanzarán ese “impuesto” NIRVANA BURGUÉS, cuando suelten a sus niñ@s en el cole a las 8 ( las 9 en el caso de los más fortunados) y los recojan a las 17,(o a las 18 si están apuntados a la extra-escolar) con la carita limpia, y la coleta recogida.
La verdad, que no sé como explicaros que es este NIRVANA BURGUÉS, que experimentan algunos padres, sin utilizar la palabra PUTADA, pero puedo deciros lo que No ES. Pues…
- No es la existencia común a la que está sujeto el ser humano, puesto que se sustenta en un convencionalismo social, en un mal apaño entre la vida familiar y laboral.
- No es ningún tipo de evolución o conversión, aunque sí ayuda al desarrollo personal…puesto que…o te fortalece o te hunde.
-No tiene fin, aunque sí un principio ya olvidado y partes o etapas que se puedan distinguir unas de otras de hecho si echamos la vista atrás….uhmmm, desde bien pequeño al colegio, luego….el instituto, la universidad (aquí ya se acabaron los veranos felices), y luego…eso sí….el maravilloso mundo laboral, porque: “-has de ser un hombre, o una mujer de provecho, y por supuesto porque tienes una hipoteca que pagar”-.
- No puede ser descrito con palabras, aunque sí deciros que se experimenta con cierta dualidad, ya que o sientes la AGONÍA o la CALMA, según seas padre o hijo.
…y por todo esto, Hoy,que ya es Septiembre,que ya es el día quiero dedicar "esta parrafadita" a esos “locos bajitos”, que casi me hacen llorar,
Porque sé que es una putada,
con cariño para vosotr@s.